Tríptico trinitario (encíclicas Redemptor Hominis, Dives in Misericordia y Dominum et Vivificantem). En ellas Juan Pablo II sitúa al hombre en el centro, desarrollando una antropología con Cristo vivo presente en nuestras vidas, un Dios misericordioso que acoge y un Espíritu que acompaña, guía y reconforta.
Encíclicas sociales (Laborem Exercens, Sollicitudo Rei Socialis, Centesimus Annus). Trabajo sobre capital, hombre sobre los medios, ética sobre la técnica.
Encíclicas sobre la Iglesia: Slavorum Apostoli, Redemptoris Missio, Ut Unum Sint, Ecclesia de Eucharistia, Redemptoris Mater. En los tiempos del postconcilio, en los que había que llevar a lo cotidiano las conclusiones del Concilio Vaticano II, todas estas encíclicas enfocaron la misión de la Iglesia en estos tiempos de cambios de mentalidades, coincidentes con el cambio de milenio, siempre desde las raíces.
Encíclicas sobre el hombre: Veritatis Splendor, Evangelium Vitae, Fides et Ratio. “El Papa considera (afirma Ratzinger), con razón, que la fe está llamada a impulsar a la razón a tener nuevamente la valentía de la verdad. Sin la razón, la fe fracasa; sin la fe, la razón corre el riesgo de atrofiarse”.
Hemos propuesto la lectura de los dos primeros capítulos de la primera encíclica de San Juan Pablo II, Redemptor Hominis, Herencia (1-6) y El Misterio de la Redención (7-12), con el siguiente esquema:
Dudas, aclaraciones.
Aspectos más importantes. Destaquemos dos o tres que nos resulten más relevantes.
Qué tiene que ver con mi vida. En qué cuestiones del documento, San Juan Pablo II nos lleva a una meditación más personal, que podemos aplicar a nuestra propia vida.
Acción de gracias. Un compromiso personal o común a partir de la reflexión que nos aporta la lectura.
La próxima reunión será el martes 24 de noviembre, a las ocho. Siempre es enriquecedor y transformador el hecho de compartir la lectura y la vida a la luz del evangelio. Les esperamos.